Una trombosis venosa o una embolia pulmonar es una complicación postoperatoria muy grave incluso estando ingresado en el hospital. La estrategia más segura y eficaz es la prevención desde el mismo momento que el paciente ingresa para la cirugía.
Tres puntos clave:
1. Medidas neumáticas de compresión mecánica intermitente durante la intervención y en las primeras 24h.
2. Movilización y deambulación precoz.
3. Heparina fraccionada por vía subcutánea que reduce la coagulación de la sangre. Un mínimo de 7 días